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Dr.
Freddy Pacheco De una población mundial estimada de 115.000 tortugas baulas hembras (en 1982) para 1996 el número había caido dramáticamente a 34.500, nos dice la Organización Wildaid. Pero aún hay más de qué preocuparnos. Según varios destacados autores (Revista Nature, junio del 2000) las tortugas baulas del Océano Pacífico "se encuentran al borde de la extinción". Y agregan: "La población de baulas en el Pacífico Oriental, que anida en las costas de Costa Rica, Nicaragua, Panamá y México, disminuyó de 91.000 hembras adultas en 1980 a sólo 1.690 en 1999". En concordancia con esos datos, sólo 69 tortugas baulas llegaron a desovar a las playas del Parque Nacional Marino Las Baulas en la última temporada, cuando hasta hace unos diez años la cifra era de unas 1.400. Pero, ¿cuál es la razón de tal desastre ambiental?, se preguntarán ustedes. ¿Cómo es posible que pese a la protección de sus sitios de anidación, se esté presentando esta lamentable situación? ¿Qué más se puede hacer para salvarlas de la extinción? Los autores de dichos estudios (Spotila, Reina, Steyermark...) concluyen que en el Pacífico su disminución está asociada fuertemente a la mortalidad que se presenta en la pesquerías que usan las llamadas "longlines" (líneas con anzuelos de hasta 100 kilómetros de longitud). Coincidentemente con ellos, la Austalian Marine Conservation Society divulgó en 1999 un artículo donde indica que a partir de 1984 se ha venido produciendo una disminución de un 22,7% anual de la población que anida en las playas del Pacífico mexicano, donde menos de 100 tortugas anidaron en 1996. Y así, al indagar sobre las posibles causas de tal disminución (obviamente relacionada con algún hecho brutalmente dañino) encontraron que estas tenían relación directa con la industria pesquera que usa "longlines" y trasmallos ("gillnets") en el Pacífico chileno y peruano. Según sus estimaciones, los pescadores de pez espada de ambos países sudamericanos (que usan "gillnets") podrían haber sacrificado más de 3.600 tortugas al año; para entonces no habían estimado las muertes provocadas por la creciente flota que ahora utiliza "longlines" en aguas de Chile y Perú. Tampoco en Costa Rica se ha hecho esa estimación... Pero eso no es todo. Las baulas también son eliminadas por los pescadores de atún y calamar del Pacífico Norte. Sólo en la temporada 90-91 se capturaron más de 1.000 tortugas, aunque no se ha logrado saber cuántas más mueren después de que, lesionadas, logran escapar de las redes de pesca. Está así documentada la razón principal de la drástica y alarmante disminución de la población de tortugas baulas del Pacífico: la pesca incidental asociada a las grandes flotas pesqueras que indiscriminadamente arrasan con todo lo que se mueve en las aguas de ese gran océano. Hacia Chile y Perú habría que dirigir los mayores esfuerzos en pro de su conservación pues los pescadores de pez espada (especialmente) matan miles de tortugas al año, según datos que confirmara independientemente de los estudios anteriores otros autores (por ejemplo, Eckert). Un estudio hecho para la California Seafood Council en 1999 (por el Dr. Benny Gallaway) podría ser de gran utilidad en ese esfuerzo internacional que urge implementar. En resumen consiste en examinar cuidadosamente los patrones temporales y espaciales que sigue la actividad pesquera, para así tomar decisiones proteccionistas fundamentadas en los patrones temporales y espaciales que caracterizan los movimientos de la población de baulas en las áreas en que se da una intensa actividad pesquera. El éxito alcanzado en las regiones marítimas cercanas a las costas de California y Oregón para sus baulas es altamente significativo. Ya se han dado algunos primeros pasos en ese sentido. En agosto de 1002, unas 75 organizaciones no-gubernamentales preocupadas por el destino de los océanos, se manifestaron a favor de una moratoria en contra de las pesquerías que usan las destructivas "longlines" y "gillnets" en el Océano Pacífico. En su comunicado destacan el hecho de que la tortuga baula se encuentra en la cima de las especies llevadas al borde de su extinción por esas pesquerías. Según sus datos de las 91.000 tortugas existentes en 1980 quedaban menos de 5.000 en 2002. Y agregan: "Destacados científicos previenen en el sentido de que si no se dan pasos inmediatos y significativos, la tortuga baula, que ha nadado los océanos desde el tiempo de los dinosaurios, hace 100 millones de años, se extinguirán muy pronto". Su llamado en pro de una moratoria (dirigido a las Naciones Unidas, los EEUU y otras naciones) pretende no sólo salvaguardar la población de baulas, sino también favorecer a los pescadores artesanales y otros pequeños pescadores que buscan su subsistencia en la pesca. Creemos que la voz de alerta, suscrita por representantes de organizacioens de EEUU, India, Chile, México, Irlanda, Reino Unido, Argentina, Zimbabwe, Fiji, Indonesia, Alemania, UICN y Costa Rica, ha de ser acogida por las autoridades gubernamentales correspondientes. En fin, ya se conoce cuál es la causa principal de la desaparición de las miles de tortugas que antes recorrían el vasto Océano Pacífico y que desde tiempos desconocidos optaran por visitar las playas de Costa Rica para dejar sus valiosos huevos: las "Cortinas de la Muerte" ("longlines" y gillnets") cargadas de anzuelos y trampas asesinas que se atraviesan en sus rutas migratorias.
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©Asociacion Para La Proteccion
de la Tortuga Baula y el Desarollo de la Bahia de Tamarindo - info@baulas.org
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